¿A qué suena tu vida?

Otro domingo tirado en casa, con el cerebro funcionando a las mismas revoluciones que las de un vegetal. Se me ocurre escuchar música a ver si consigo despertar el día, y tras unos minutos musicales me doy cuenta de ello: llevo malgastadas demasiadas canciones en mi vida.

Y es que cuanto más avanzas por esa autopista de mierda llena de peajes a la que llaman vida, parece que se van descubriendo los temas del recopilatorio de tu vida. Temas que te hacen recordar ese gran viaje con tus colegas o ese verano grabado a fuego de tu infancia... Temas que con sólo escuchar ese primer acorde, te transportan de nuevo a esa mítica noche de farra por los madriles. Y sobretodo esas canciones que sin querer se han fusionado con personas de tu vida. A veces creo que la vida es como una de esas niñas repelentes que asocian en su móvil un politono distinto a cada uno de sus amigos. Porque sí, cada uno terminamos sonando a algo propio, directa o indirectamente. Si bien lo normal es que "suenes" a algo que has elegido tu mismo; otras veces terminas sonando a lo último que habrías pensado.

Mierda... esta canción no... Cuántas veces habré pensado esto mismo, mientras busco corriendo como un loco el botón de siguiente pista. ¿Sabéis de lo que hablo verdad? Exacto, las canciones que ya no puedes volver a usar, porque van asociadas a esa persona que quieres olvidar o a un momento que no te apetece precisamente recordar. Que coño, si es que hay veces que no puedes ni volver a "usar" hasta un grupo entero. Ahí si que estas jodido, sobretodo si el grupo tiene mas de 8 discos de estudio que te gustaban... No debería estar permitido que las personas que pasan por tu vida, se queden para siempre con algunos de tus temas favoritos...

Pero supongo que así es precisamente como se va formando esa lista de la que hablaba. Unas veces añades de tu puño y letra el nombre de algún tema; otras veces te toca tachar alguno que te gustaba muchísimo pero que al final has terminado odiándolo. Pero eh, también te vuelves loco cuando encuentras uno de esos que con sólo oírlo una vez, ya sabes que ese va directo a tu lista. Y es curioso, porque hasta me he encontrado con alguno que sabes que debería salir de tu lista, pero aún así lo mantienes. Supongo que de una forma u otra, se habrá ganado su puesto en mi lista. ¡¡Joder!! Parece que el puto random se pone de acuerdo para hacer sonar justo lo que no quieres oír... Oye, ahora que caigo, y tú... ¿a qué suena tu vida?